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Los conceptos de accidente de trabajo y enfermedad profesional
¿Qué se entiende por accidente de trabajo?
Se entiende por accidente de trabajo, toda lesión corporal que sufra el trabajador como consecuencia de trabajo que realiza por cuenta de su empleador.
En la anterior definición, se explicita que el trabajo realizado debe ser por cuenta de un empleador y que es necesaria la existencia de una lesión corporal, es decir, un daño producido por un agente lesivo. Asimismo, debe haber una relación causa-efecto entre el trabajo realizado, el agente y el daño causado, es decir, que el daño o lesión se genere por el trabajo realizado.
En el ámbito de las definiciones legales, se considera un accidente de trabajo en los siguientes casos:
- Los que sufra el trabajador al ir o al volver del lugar de trabajo.
- Los que sufra el trabajador como consecuencia de las tareas que realiza el trabajador.
- Las enfermedades que se contraigan con motivo de la realización de un trabajo.
- Las enfermedades padecidas con anterioridad por el trabajador, que se agraven como resultado de la lesión generada con el accidente.
Un concepto más amplio de accidente
No obstante lo señalado previamente, existen definiciones alternativas desde el punto de vista de la seguridad y prevención que son más amplias y no se restringen exclusivamente a los incidentes que producen lesiones, sino que se extienden a cualquier eventualidad que pueda producir lesiones a las personas como daño a las cosas.
Así, un accidente de trabajo puede ser visto como un suceso imprevisto, inesperado e indeseado, que interrumpe el proceso normal de un trabajo, produciendo o no una lesión.
El concepto de enfermedad profesional
Una enfermedad profesional es aquella contraída como consecuencia de la ejecución de un trabajo que se desarrolla por cuenta ajena. Generalmente está provocada por la acción de elementos y sustancias que son dañinas para el ser humano.
¿Qué diferencias hay entre un accidente de trabajo y una enfermedad profesional?
En cuanto a la causa que lo provoca: Las causas de los accidentes suelen ser externas, provocando una lesión directa al organismo, mientras que, en las enfermedades profesionales, si bien las causas provienen del ambiente externo, los agentes penetran el organismo, iniciándose un proceso patológico.
En cuanto a su manifestación: Los accidentes se manifiestan de manera rápida, mientras que en las enfermedades profesionales las manifestaciones son progresivas a través de síntomas y deficiencias en el organismo del trabajador.
En cuanto a su identificación: Los accidentes son fácilmente identificables, mientras que en las enfermedades profesionales es una labor compleja, por tratarse de procesos lentos y progresivos.
En cuanto a su tratamiento: Los accidentes requieren un tratamiento médico específico, bien a través de primeros auxilios o procedimientos más complejos, en función de su gravedad, mientras que, en el caso de las enfermedades profesionales, se requiere un tratamiento médico continuo en función de la evolución de síntomas.
En cuanto a su
previsiblidad: Los accidentes en
su mayoría son imprevisibles, mientras que las enfermedades profesionales,
pueden preverse mediante el reconocimiento y análisis médicos, siendo posible
adelantarse a los posibles padecimientos
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